Son
las 5:00. Suena el despertador tres horas después de cerrar los ojos.
Cojo
la maleta y salgo a recoger a Alejandro rápidamente, tenemos el vuelo VLG1311
con un slot a las 07:05 y vamos un poco justos aunque no tengamos que facturar
maltas.
Llegamos
a Alicante todavía con los ojos cerrados, pero ya en nuestros asientos no
podemos pegar ojo ya que nos espera un gran día disfrutando de nuestra pasión
por la aviación
Puntuales
como un británico a la hora del té, despegamos por la 10 de LEAL saliendo por
la SID SOPET1G. Nos esperaba un vuelo de 50 minutos, aunque al final tomamos por
la 25R de LEBL 40 minutos después de nuestro despegue en Alicante. Una toma un
poco brusca, pero hay que entender que es el primer salto de la tripulación con
lo que no se lo tendremos en cuenta.
Atracamos
en la puerta 228, nos despedimos de la tripulación y nos dirigimos a la salida,
Rafa tiene que estar a punto llegar para recogernos. Tras cinco minutos, Rafa
nos recoge en la zona de los microbuses (Rafa, te las sabes todas) y nos
dirigimos al aeródromo de Igualáda-Ódena. Por el trayecto nuestro guía nos
ameniza con sus historias como piloto y alumno del gran instructor Iñigo
Zubiaga y su Yak-52.
Llegamos
a Ódena con un poco de retraso, ya nos están esperando dos compañeros. El maestro
Joan Velasco y nuestro gran amigo y fundador de la compañía Francesc. Al poco
llega Marc con la mala de noticia de que su peque no ha podido acompañarle a
esta estupenda excursión.
Ataviados
con nuestros polos oficiales, comenzamos nuestra visita por una pequeña
exposición de antiguos vehículos militares de época.
Tras
una breve explicación de sus historia y pasado por parte de Joan, nos dirigimos
a visitar algunos de los expositores, con la pena de saber que este año no
estaría AENA y sus preciosas cartas VFR de regalo.
En
la feria podemos ver varios componentes incluso motores y sus piezas, para
disfrute de nuestros ojos.
Íbamos
con un poco con el ansia de empezar a ver avioncillos, por lo que rápidamente
abandonamos la feria y nos dirigimos al campo de vuelo.
El
primer aparato volador que vemos es un paramotor, que por mucho que nos guste
volar, creo que pocos nos montaríamos a más de dos metros con este artefacto
Al acercarnos a la pista nos recibe un precioso
bimotor azul con una pasada rasante a unos tres metros de altura que al poco
toma pista sorprendiéndonos con “el piloto”, resultaba ser una conocida piloto
de aviación comercial
Seguimos
con nuestro paseo por el borde de la pista hacia el sur, donde nos detenemos a
ver un stand de autogiros. Unos aparatos preciosos y según nos comenta uno de
los responsables del stand, una maravilla en su manejo y con unos costes de
mantenimiento y servicio realmente bajos.
Tomamos asiento en la terraza de la cantina para
tomarnos las primeras cervezas y a contemplar los despegues cruzados debido al
viento que hacía. Algunos intentaban corregir con el timón, y otros optaron directamente
a cambiar el rumbo una vez en el aire.
Y
por fin, la gran sorpresa que nadie esperaba, un precios YAK-52 con un
co-piloto que nadie esperaba. Nos
deleitó con unos cuantos loopings, toneles y rasantes, haciendo rugir a un
precioso motor radial que ten ponía los pelos de punta. Una autentica
maravilla.
Después
nos fuimos a comer a un restaurante cerca del aeródromo donde hubo momento para
hablar de todo y compartir mesa con los amigos.
Tras
la comida volvimos a dar otro paseo por el campo de vuelo, viendo a esas
pequeñas maravillas como volaban y nos mostraban algunos trucos a la hora de
hacer tráficos, como por ejemplo hacer el tramo en cola alejándose en diagonal
de la pista, para aprovechar el viento cruzado en el momento del tramo de base
y final.
Fue
momento también de compartir experiencias como las de Enric en su preparación
como futuro piloto VFR de la compañía, Marc con sus aventuras con la
informática o Javier (Vueling) con su experiencias con la Baron, de la cual
llegó a decir que es muy dócil (yo creo que le han dado otra, que no puede ser
que diga eso de la Baron). Peripecias en la rodadura para no lanzarte en el
carreteo, opiniones sobre como está el mundo de IVAO y posibles mejoras, y
otras mil experiencias que fueron magníficas de compartir con mis compañeros.
Fue una pequeña clase magistral de gente como Rafa, Joan o Luis (AHS).
Ya
estaba atardeciendo y hubo otra oportunidad de disfrutar con el vuelo del YAK,
con el que decidimos poner fin a nuestra visita al evento organizado en un
precioso aeródromo.
Camino
del parking dilatamos un poco más nuestras conversaciones, pero muy a nuestro
pesar nos teníamos que marchar emplazándonos al próximo Airsim de Barcelona en
Octubre.
La
verdad es que es una pena que a estas cosas sólo vayan los compañeros de la
zona, por que merece la pena muy mucho desplazarte para estar con los amigos y
disfrutar de esta gran pasión. Y si no que se lo pregunten a Toño o Luismi que
el año pasado estuvieron en el primer AirSim de Barcelona.
Vuelta al hotel con nuestro amigo Rafa como
piloto (del coche). A descansar que el día fue muy intenso.
Al
día siguiente regresamos a Alicante a las 08:55, esta vez, si descansamos en el
avión, tuvimos oportunidad de soñar imaginado que éramos los pilotos de algún
que otro avión que vimos en el día anterior.
Hasta
pronto
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